sábado, junio 20, 2015

Arrastrándome






















En el 2008, tuve los huevos de dejar una consultora, luego de 6 meses de trabajo, sin estar seguro de conseguir trabajo, pero con mucha más entereza y firmeza de conseguir uno. Tuve la suerte de, no sólo conseguir, sino de entrar en el mismo lugar que me sentía a gusto y reconocido por mi cuenta

Eso duro 3 años. En el 2011 hice cursos y tuve un año estable economicamente. 2012 especulé en no laburar o tratar de hacer otra cosa, en la que me equivoqué. 2013 tuve el fruto de las equivocaciones pero trabajé, en el 2014 seguí pagando mis equivocaciones en las inversiones, pero lo compensé con trabajo.

El 2015 no es igual que el 2008, perdí años de agiornamiento en el rubro en que me encuentro. En Mayo entré en un alerta con respecto al dinero, para subsistir sabía que me quedaban pocos meses para descapitalizarme de la bolsa, e incluso vender el auto. Pero la llamada esperada desde Enero surgió, pero el esfuerzo debía ser mayor: hablar inglés con gente que no me quiere en su equipo. Los de acá, si me quieren, pero es por mi pasado, porque es el fruto de haber cerrado las cosas, producto de mi gratitud hacia el ambiente cómodo, confortable en que me encontré todos esos años. 
Pero las cosas, hoy son distintas, mi nivel de arrastrado se nota cuando voy con una hojita a quien me contrato diciéndole: "Está bien esto?" como si fuera mi salvador.  Sé que doy asco, que mi especulación para acumular horas de trabajo es muy notoria. 
Carezco de inteligencia y de nivel protocolar, sumado a que no tengo mucha ropa de trabajo para usar, que no compré en años!!! Y que para vestirme lavo camisas a mano y demás. 

Estoy arrástrandome por la guita, después se habla que uno debe hacer lo que quiere, en este caso no. No puedo parar la pelota y negarme a decir: "Esto no me gusta", no puedo. Pero el comportamiento de estas semanas es patético, no sé como actuar, no sé como decir: "YO sirvo, puedo colaborar, si quieren limpio sus computadoras, pero quiero estar".  

Y es así, anotando cada que estoy sentado en el escritorio, generando no sé qué, sin un plan, sin fechas de entrega, sin nada en concreto, como si fuese la única aguja en el pajar. 

Me doy lástima, mucha lástima, pero esto es producto de lo que generé en mi ser, las construcciones, en este caso, tiene un valor valuable diluído con el tiempo.

No hay comentarios.: