martes, diciembre 30, 2014

Chau 2014 – Un año con altibajos y alteraciones
















Otro más que se va. Qué año la puta madre! Encerrar los años en etapas que comienzan y terminan, a mí, le da sentido a la vida, como ella, también, tiene un naciemiento y un fenecimiento. Los números justamente me sirven de manera que, paro la pelota, reflexiono, y le doy “valor” a los acontecimientos que la memoria recuerda, en éste momento, del 2014 que se va.

Repasemos entonces…

Enero comenzó tranquilo, si bien no contaba con liquidez para comprar cosas con billetes, tuve trabajo, unas facturas que me debían y una serenidad y tranquilidad absoluta. Mi vida era la pileta, trabajar, mirar películas de hoteles de alojamiento por youtube y algunas antiguas como “Las aguas bajan turbias”, etc. El primer bajón fue la muerte de un amigo al que compartimos tanta noche, tantas cenas, tantas risas y reflexiones, por la maldita cocaína, esto sucedió el 24 de Enero, además de la primera brega que tuve con mi conviviente cuando llegó, a mediados de enero. Es por eso que este mes se repartió entre serenidad que fue la antesala de la tormenta de la segunda mitad del mes.

Febrero seguí trabajando en el Laboratorio, con alegría, entrenando natación y un mes al que no recuerdo nada puntual.

A fines de Marzo dejé de trabajar, luego de 4 meses casi consecutivos, donde me permitió en Abril y Mayo hacer bolsa e interiorizarme con análisis exaustivos de balances y de análisis técnico. Fueron meses que si bien entrené y fui feliz hacerlo, como también jugar a la pelota; tuve muchas peleas con la señora de la casa, y dormía en el sofá. El dolor de muelas fue otro constante.

Junio fue el viaje a Rosario, un lindo viaje con FC-Max, además estuve a punto de irme de la casa, pero el festejo del cumpleaños postergó la salida de la misma. Se comenzó a vislumbrar un proyecto que, por suerte se dio y aceptaron el plan. Trabajé con Tamara que fue una de las personas más solidarias éste año. No quiero dejar de mencionar el mundial exacerbado de fútbol, donde me entretuvo, pero me harta la pasión que le quieren imponer. Argentina tuvo un exitoso subcampeonato, por encima de casi todas las selecciones del mundo.

Julio me tuvo trabajando y jugando al fútbol, y preparando un viaje a Sierra la Ventana a fines de Agosto, donde una semana antes padecí un dolor de lumbar insoportable, y casi no corro la maratón de Cabildo, por suerte con pastillas y elongación todo se solucionó.

Luego de la espectacular maratón y el gran viaje con la familia, comenzó la decadencia. Murió mi padre, mi hermano ya no iba a tener una contención familiar importante. El encargado del hogar le dijo el fallecimiento de una manera muy honesta y sentida. Realmente me emocionaron sus palabras y la forma respetuosa de dirigirse a mi hermano y al trato de los pibes del hogar. Cumpleaños y peleas con la señora de la cosa, con carácter fuerte de ambos lados. El odio era inminente

Entrenamiento Maratón de Buenos Aires, luego de una semifinal caliente del torneo de fútbol que perdimos 0-3 con los campeones, con el primer gol polémico y un arquero de éste equipo impresionante. La maratón tenía el peso de una separación definitiva y de problemas físicos a raíz de jugar a la pelota, llegué como pude, con lo justo, y a pesar de la baja presión y de los dolores de espalda, culminé la maratón número 30.

Búsqueda de pensión, encontré una, luego de caminar prácticamente otra maratón. Mucho calor, muchas tensiones, en el trabajo me iba mal, no funcionaba, tuve miedo de no cumplir, porque la persona que me coordinaba, no tenía que sufrir mi angustia y depresión. Octubre, como una constante, fue el peor mes del año, donde contabilicé 14 días malos. La pensión parecía una cárcel, a los compañeros le tuve miedo.  Eramos 7 en un departamento, donde compartíamos dos baños, una heladera pequeña y el comedor.  Traté de mostrarme duro y amable, en términos generales la convivencia fue aceptable; no bancaba sentirme invadido: para cocinar, para bañarme, para sentarme en el comedor cómodo, y a pasaba horas en la cama. Además en Noviembre, el laboratorio culminó.
Comencé en este mes otro curso de bolsa, entrené mucho para la Maratón de Mar del Plata, y mucho huevo a la actividad física.

El viaje a Mar del Plata fue genial, el sábado disfruté del mar, el domingo corrí una de las maratones más espectaculares que hice, y a la tarde me reuní con un viejo coforista y su familia y comimos facturas y vimos el partido. El lunes me junté con un hombre que maneja bolsa y conocí la bolsa de comercio de Mar del Plata. El marte terminé en el mar…Regresé enfermo de faringitis, pero lo cambio por unas buenas vacaciones.

En diciembre busqué departamento, teniendo el aval de los padres de mi amigo Poly que, vino de Estados Unidos, para casarse.

Conseguí departamento, los pasos para mudarse, aún son muchos, pero salí de la pensión, con una minita ambiciosa apurándome para que me vaya…asco me dio y  ni la pienso recomendar a nadie.  Del otro lado, está el fletero que fue muy generoso en cómo me ayudó a mudarme con un calor insoportable. También estuvo el casamiento de Poly, es raro, pero la gente se casa y vislumbra un futuro firme y sólido, con proyecciones, casi, concretas. Volví a ver, en son de paz, a la señora que tantas peleas tuve y le cuido su hogar.  Extraño también, pero en mi caso, pasa porque valora los puntos positivos y que nos llevamos bien, pero no hay una vuelta concreta.

En síntesis este año tuve un muy año físicamente hablando con 4 maratones, un torneo de futbol y una agua abierta en el mar de Gessell. Animicamente tuve vaivenes conmigo mismo y una pelea constante y desgastante con mi ex, además tuve la experiencia de vivir en una pensión y la búsqueda de departamento. Economicamente pude sanear, con gran esfuerzo, las estafas del año pasado, aunque gasté mucho en boludes y otras cosas que, me obligan a tener laburo, sí o sí, a mediados del 2015.


Otro año diferente y alterado. El próximo cumplo los 40, y los objetivos le iremos planteando en otra entrada…Chau 2014, gracias por todo y a pesar de todo.

martes, diciembre 23, 2014

La lista 2014





Un libro:
Manual práctico del Odio de Ferrez
Una canción:
Tres canciones esta vez: "Deseos de cosas imposibles" Oreja de Van Gogh con Abel Pintos; "Amor electricidad" Maldonado; "Casi desangelados" Indios
Un grupo musical:
Cielo Razzo, letras tranquilas y oscuras, como símbolo fue nadar en Gessell con Luminoso de esta banda
Una pelicula:
El critico 
Honestidad bruta:
Mi intolerancia hacia muchas acciones asusta
Una mujer:
Tamara S. me dio trabajo, confió y me apoyo en las malas, laboralmente hablando...Muy buena Relación
Un hombre:
Cristian no sólo por cuidar de mi hermano sino por ser solidario con mucha gente de un hogar en el campo
un viaje:
Mar del Plata, este año lo disfruté mucho
Un lugar:
Se repite la Reserva Ecológica 
Un deseo cumplido:
Correr 4 maratones en un año y en forma de celebración
Persona perjudicante:
Yo mismo en muchas ocasiones.
Un maestro natural:
José con respecto a la actividad fisica
Una actividad:
Correr y jugar al futbol
un acto solidario:
Haber evitado un robo
un autor:
Ferrez
una novedad:
Vivir en una pensión
una situacion de calma:
El relajo que se siente después de un fondo largo
un paisaje:
El mar en Mardel y en Gessell...
un evento:
Supongo que el casamiento de Poly
una reunion
Los almuerzos del mediodia 
un mes:
Mayo me aprobaron un presupuesto y lo pasé bien
un mes pesimo:
Octubre, nuevamente, me separé, casi no trabajé, la bolsa se cayó a pedazos.
un deseo no cumplido:
La falta de estabilidad y hacer malabares con el dinero
un exito:
Llegar con alegría en la maratón de Mar del Plata.


martes, diciembre 16, 2014

El robo frustrado de la bicicleta














Caminaba por Rodriguez Peña, casi llegando a Corrientes. Mi cabeza estaba a mil, pero el cuerpo cansado de la mochila derrotera que acumulo en esta última etapa. Sentía, para ser más concreto, la presión baja.
Me llamó la atención una voz chichona de una mujer de cuerpo robusto y de acento Colombiano, la compañera, una fémina, muy bella no la miraba, sólo observaba el alrededor. Supongo que ambas atendía el negocio de decoración.
Junto a ese negocio hay una imprenta (no conjugo con "había", porque está, a pesar que yo no en el escenario) En la vidriera de la misma yacía una bicicleta, un hombrecito con sucios harapos, en su rostro se iluminaba una sonrisa con alerta. El pibe tomó la bicicleta de manera altamente sospechosa. Las mujeres comenzaron a gritar, yo ya había hecho 10 metros, sin perder de vista la escena.
"Parenló, parenló". El chico, torpemente comenzó a andar. Lo tomó del brazo y lo desplazo del vehículo. 
El dueño la contuvo, aferrandóse a la rueda de atras y manisfetando: "No me robés, no me robés, gracias"
La mirada a este chico fue de temor, esperé respuesta, sinceramente creí que me iba a pegar, pero ambos nos miramos en forma temeraria.
El chico salió caminando, y un tipo exacerbado exclamó: "Hay que matar a estos chorros, hay que matarlos a todos"
Me quedé shockeado, yo no entendí nada. Yací mareado un rato, sin mantener la fija en ningún lado, no comprendí la situación, siquiera sé si hice bien en actuar...
Creo que volví a hacer un antiheroe, pasé inadvertido y no me importa si está bien o mal.

jueves, diciembre 11, 2014

Maratón de Mar del Plata 2014 – Viento, locura y ruido.
















Está fue mi maratón número 31, y sin dudas, figura entre las tres más disfrutables, porque no sentí muros y realmente no contaba los kilómetros para saber cuánto falta, me dejé llevar por la misma

Arranque “Feliz”, tema de Estelares, donde a las 7 y 10 de la matina fuimos para el lado de la escollera. En este tramo de 3 kilómetros, me volví a encontrar con el Mendocino de la maratón pasada y otras y con el Bohemio. Saludé, sin concentrarme que estaba trotando. Antes de llegar a la escollera, fui a hacer pis, bromeé con un amigo maratonista que iba a abandonar.

Al transitar la escollera canté “Aquí no podemos hacerlo” de los Rodriguez. El viento no importó, el fresco ya estaba absorbido por el calor de mi cuerpo, iba 5 kilómetros.

Salimos de la escollera y subimos por Playa Grande, una subida rápida y una bajada con los brazos relajados, al escuchar: “El tiempo lo dirá” de Los Rodriguez, un señor con mucha bronca repitió: “Callate estúpido, cállate estúpido”, el señor corría la media maratón, yo me puse al lado de él y le pregunté que le pasaba, los demás, por suerte, saltaron diciendo que cada uno hiciera su carrera, y por fortuna, asi fue. El, con su ira, corrió más rápido, yo seguía al ritmo que me quedaba cómodo, que era bastante estable, porque muchas caras repetidas en el primer trayecto.

En el 10, veo una suelta de globos espectacular, saludo a Pablo Diaz, que estaba serio, le digo que se ría. Junto a la suelta “Religión pagana”, de No te va a Gustar, donde habla que la música une, sana y cura, me llevó a la primer emoción.  Una gran imagen y una buena letra envolvente.

Alrededor del 13 me encuentro a Daniel de Mar del Plata que, hace años lo veo cada vez que voy allá, muy generoso me acompaño y hablamos unos 2 kilómetros, aprovechando el viento a favor. En el 15 me pasa Gerardo Ré, no pudiendo creer que me traspasó tan rápido, y hace un cambio de ritmo impresionante. Yo seguía al ritmo que la alegría me indicaba.

Se vino el viento en contra, casi en el kilómetro 16, y la ultima canción de Miranda: “Es positivo se vuelve adictivo”, donde señalaba a todos y comencé a cantarle a la gente. El viento en contra se soportó, las piernas pudieron contrarrestarlo. Si bien no canté 3 temas seguidos, con “Siempre libre” y buscando “Vivir con emoción, siempre libre” de Turf, me nefregó el viento en contra.

Al subir la cuesta de la Perla, casi llegando al 20, le digo a uno que se ponga atrás mío un tipo que hicimos ese tramo juntos, lo hace. Y canto: “Uyy que loco estoy, maldito infierno blanco” de Guasones, a los gritos pelados y todos cagandose de la risa, por mis gestos de loco.

Paso el 21 con “Pasan las Horas”. Cuando en el 23, en el puesto de abastecimiento, saludo afectuosamente a los que se vistieron de muñeco y a los piratas, se cagaban de la risa, y bueno gritando que era “el mismo vago y el mismo fracasado, un poco más delgado pero voy de pie”, subí la cuesta de Cabo Corrientes, el gorro se me volaba, corrí sin gorro, subiendo y con viento en contra, me empujaba para atrás y me concentré en avanzar y subir, jamás abandoné. En la escollera seguí gritando y desafinando, ya íbamos 25 kilometros y “Gran señor” de los Decadentes me revivió. 

Luego sonó un tema que me acordé de mi vieja cuando cantamos y bailamos en esta ciudad con mucha alegría, me emocioné y canté más fuerte: “Es que hay algo en tu carita que me gusta, que me gusta y se llevó mi corazón”.

Paso el túnel y agradezco a cada uno de los voluntarios porque se tuvieron que bancar la oscuridad, el frío y el bancar a los corredores. Uno me dice: “Gracias a vos por tu actitud”.

Subo nuevamente la cuesta de Playa Grande, cansó un poco, pero después me plegué al viento a favor, a partir del 28 y canté con la gente “Deseos de cosas imposibles”.  “La conocés?” le pregunté a uno, me contestó afirmativamente. Con “Azul” de Cristian Castro y señalando el mar como un tonto, pase el 30. En Punta Iglesias saludé a Richard, y a Rosa por tercera vez, les comenté que me sentí muy bien. Bulldog me acompaño hasta el 37, lo curioso fue en el 34 que había una mina locutando y bailando; ensayo un baile con ella, me pone cara de orto y expresa, en el micrófono: “Perdí la inspiración”, me cagué de la risa y corrí, prácticamente en solitario, sólo me paso una mujer que cambió el ritmo y tenía en la remera el nombre “Ingrid”,  y a los otros los alcanzaba de a poco.

El viento en contra fue más duro, por el cansancio y, supongo, sopló más fuerte. Me dije que me haga “amigo” del viento y así fue, no dejé de correr, exceptuando en un puesto donde tomé gatorade, pero cada segundo que el viento cesó, era un alivio, y reparaba ahí. Casi en el 39, le digo a otros dos corredores que nos refugiaramos en unas bicicletas, trotamos un gran grupos detrás.

“Amor electricidad” me hizo recordar a los acordes que toco en la guitarra de ese tema, y pensé en ello. En la última cuesta, llegando al 41, la hice con ganas y cantando “Casi desangelados” de Indios. 

Casi al llegar, un beso a Rosa y a Richard y le digo que fue una carrera espectacular. “Me diste más velocidad en el desierto, voy  a seguir, voy a pelear y no me quejo, tengo a mi madre libertad para cambiar este amor” (Mancha de Rolando, nuevamente) fue lo último que escuché en esta Maratón espectacular, donde me aplaudí solo al arribar a la meta. 

martes, diciembre 09, 2014

¡Animo che!





Comencé el día con un dolor agudo en la garganta, y la boca pastosa de mucosidad. Me fui a la guardia del Policlinico Bancario, me atendió, muy amablemente una doctora venezolana. Me realizó unas preguntas, me tomó la fiebre, y se fijó en los pulmones. Me dio 3 remedios, acusando que es una faringitis.

Salí del hospital y fui a la farmacia y me dijeron que no aceptaban tarjeta de débito, y que tenía que pagar en efectivo. Fui a buscar dinero a un banco muy cercano, pero no expendía dinero, escojo la opción de “Cajeros Cercanos”, y el más próximo estaba 1,6 km, realmente con el calor y mi debilidad me costó caminar esos 3,2 km. Llegué a la farmacia y me atendieron para el orto, un medicamento no tenía la composición exacta, porque era plus, pero servía según la farmacéutica.

Luego, llego y la computadora rota, la partí con un auricular, cuando me acosté ayer y rompí la pantalla. A mi que no me sobra un mango, tuve que dirigirme al centro para cambiar, por suerte, la pantalla por una luca doscientos. Realmente creo que falta menos para fundirme, y decir: “Game Over”, porque la bolsa hoy bajó un 7,5% y yo un 5% de mi cartera, y realmente me desconcertó y me fundió, lo que pretendía de la misma.

Entre las cagadas que hago y se me presentan, mi estado de salud, mi decadencia afianzada y afirmada, porque no tengo la inteligencia de resolver nada, sino acaparar problemas y más problemas, realmente no sé que carajo hago en este mundo, hoy está para cerrar las persianas y decirme: “Ya está, disfrutaste”, de la mayoría de la gente no confío, y supongo que no seré confiable. Todos, a mi alrededor, están equilibrados y firmes, yo paso de abismo tras abismos, con cierta luz. Sin embargo, Miguel Cantilo y Durietz, alguna vez, compusieron está canción, que refleja mi presente decadente, y lo mencionan eh?. Pego la letra y el video, sé que tengo que barajar las cartas y dar de nuevo, para vivir un poco más tranquilo, pero se dificulta, se cierran muchas puertas, y yo no tengo idea del cómo abrir una.

 El tema de Pedro y Pablo

Miro, la sombra de un soport 
cayendo en al rededor, y tu vos 
repitiendo una queja del amor y la fe que se aleja 

Vino, un trago y el sabor 
que ahoga la emocion 
pero no es suficiente con eso 
se te ve decadente y espeso 
se te ve de caer 

Animo che, Animo que 
la vida es muy larga 
Animo che, Animo que 
esto no se acaba aca 
la vida continuara (veras que si) 
esto no se acaba aca 
la vida contiiinuaraaa. 

Algo, merece tu perdon 
no todo es un bajon 
levanta la cabeza y mirame 
no penses olvidar escucharme 
somos un poco eternidad podemos intentar 
acabar con el tiempo vivido 
y empezar otra vez el olvido 
y empezar otra vez 

Animo che, Animo que 
la vida es muy larga 
Animo che, Animo que 
esto no se acaba aca 
la vida continuara (veras que si) 
vale mas andar a tiendas 
que mirando para atras 

ooooh! tururuptu tuptuptururu 

Animo che, Animo que 
la vida es muy larga 
Animo che Animo que 
esto no se acaba aca 
la vida continuara (veras que si) 
esto no se acaba aca 
la vida contiiinuaraaa.