lunes, abril 24, 2017

17 años de la difusión del Rock Nacional


















En los años 90', los grupos de afuera invadían a la Argentina. Apenás los grupos conseguían ser soporte de los mounstros que venían del extranjero, a los que yo no les entendía lo que comunicaban.
En los recitales barriales no llevamos ni a las 500 personas, dura era la vida de los artista nacionales. 

Hoy es el cumpleaños de la radio que escucho a la mañana, que pasan música de acá y de Uruguay, con la impronta que me sensibiliza desde muy temprana edad, a través de grupos y solistas que me hacían (y me hacen sonreir). Algunos saben que estuvieron haciendo cuando Bergoglio fue papa, cuando Argentina salió campeón de la bolita, cuando sucedió lo de las torres gemelas, entre otros eventos.

Llegaba de Brasil que me esperaba mi novia de esa época, y al coincidir en el género de música que ambos escuchábamos, me dio la noticia que había una radio que pasaba sólo música nacional con una antena de gran alcance.   
Me enteré que era de Hadad, personaje nefasto para esa época, pero no me importaba, ya que no paraba de escucharla y de cantar las canciones.  Y a partir de ahí, años después, comenzaron los festivales de Rock Nacional, como los de la bebida cola o de la cerveza marketinera.


Es ahí donde, además de la nostalgia que me daba la música cuando era chico, comenzaba una época en donde su lírica, poesía y música, era un cocktel energético para acompañarme en los eventos de cada momento de mis días, que, al escuchar una canción de la música popular argentina,  recupera una escena extraordinaria de mi vida. Porque la musicalización del tránsito que llevo en este lugar, es por la música de acá. 

17 años tiene esta radio junto a la música de acá. Yo creo que desde que nací, y no hubo una banda extranjera que me atrajera mas que ciertas bandas de acá.

viernes, abril 21, 2017

Crisis cuarentona.




¿Cómo iba imaginándome después de los 40? Primero el tema hijos nunca me entusiasmó, así como tampoco tuve idea del asunto de “laburo estable”. 
Hoy estoy parado en una veteranía que, con las limitaciones física in-crescendo, no está a la altura de la experiencia vivida. Quizá por la vagancia, y por mi poca historia contable, el cuerpo le gana por varios cuerpos de vejez y deterioro a mi mente.  Observo gente de mi edad que tiene muchas cosas en la cabeza, que el vocabulario que utiliza es rico, maduro, contundente, fluído y con cierto piso. Que, tal vez, su piso es mi techo, porque me parece demasiado culpable. El piso establecido es ir acomodándose en su experiencia y con su cuerpo.
Todas las actitudes horrendas se multiplicaron.  A saber, la fobia social, no puede ser neutralizada con el alcohol, porque ya tomar y estar ebrio no me gusta (y eso es una limitación), pago un precio enorme.  El físico que me juega malas pasadas en todo sentido, entre piel, dientes, contracturas, desgarros, pulso, calvicie, inseguridad sexual, y realmente, no realizo nada demostrable con mi cuerpo.  La mente incita a la angustia y la depresión. Esas jornadas de consumir cosas vacías y nimiedades, ahondan más mis angustias.  El sentido de contar las situaciones y opiniones son chatas, porque doy la razón enseguida. Por eso me doy asco cuando charlo porque no tengo fundamentos, profundidad, ni una postura determinada.  El trastorno de atención se acelera.  La experiencia, realmente, a esta altura no me sirve para nada. Sin dudas, los 30’ fueron una mezcla entre potencia y experiencia.  La edad hay que llevarla para mostrarse a los demás, pero no, yo no la llevo, soy un pendejo limitado por un físico de un veterano decrépito.
A través de una página (http://lifestyle.americaeconomia.com/articulos/10-senales-que-delatan-la-crisis-de-los-40 ) me adhiero (o no) a los postulados estándares de la crisis de los 40:

  • Elegir destinos de vacaciones a los que se fue de niño o adolescente, sólo por el hecho de rememorar historias vividas. 
    Mi identificación: Mar del plata es lo que elijo, muy seguido.
  • Pensar en aspectos religiosos o trascendentes, aunque sea sólo a chispazos, porque los aspectos existenciales comienzan a no ser tan lejanos ni ajenos.
    Mi identificación: Tengo necesidad imperiosa en creer algo, mis planteos existenciales es el sentido de la vida, las actitudes desembocan en caminar, bajar la vista y caminar adonde caiga.
  • Sentir que aún es tiempo de aprender a tocar batería, teclados o guitarras con un claro afán rockero.
    Mi identificación: Casi dejé la guitarra, si bien cantar lo sigo sosteniendo, al igual que los recitales, pero no por espíritu rockero, sino porque es una de las pocas cosas que me gustan, y que creo que son los últimos recitales, justamente me planteo constantemente eso y me apena.
  • Comparar la apariencia con la de otros de la misma edad.
    Mi identificación: Si, comparo y realmente, como dije antes, mi madurez y mi resistencia física está en plena decadencia.
  • Tomar suplementos vitamínicos, chía, omega-3 y cuantas pastillas prometan un estado vital activo.
    Mi identificación: Lo hago, mucha limitación física-mental.
  • Ser un permanente actor en las redes sociales para mostrarse siempre como un tipo moderno y digital.
    Mi identificación: No soy ni moderno ni digital, tampoco me muestro de esa manera
  • Revisar en qué andan antiguas novias en Facebook.
    Mi identificación: Si hay actual también veo sus ex o los de ahora.
  • Sentir ciertos cosquilleos incómodos con éxitos ajenos, de manera especial si el exitoso es más joven. Ante ello se establece el inmediato pensamiento en torno a cómo pasó el tiempo sin hacer todo lo que se supone que se esperaba hacer.
    Mi identificación: Si, reniego del pasaje del tiempo, como dije. Y los éxitos de los demás, y soy consciente que yo no quiero ser exitoso ostentoso.
  • Desear constantemente una vida más sencilla, menos ajetreo, tomar y ver las cosas con mayor calma y sin tanta prisa.
    Mi identificación: Es cierto, en mi caso brego para soltar algo, cada vez que se presenta y perjudica. Y muchas veces me quedo en el deseo.
  • Preocuparse de que alguien más joven pueda llegar a reemplazar las labores de uno en el trabajo.
    Mi identificación: La incompetencia, el sentirme inútil, o sentir que tengo una utilidad muy efímera me hace dudar de todo lo que implique ganar y sostener algo. Pero esto de siempre, a menudo siento que el tonto soy yo.
     
    Bueno la crisis de los 40 ha potenciado mis defectos que son mucho más que mis virtudes que decaen, porque mis pensamientos y reflexión se bloquean.  Lo que me libera es escribir, porque es la única manera de sentir que no tengo lugar a debate y aprovecho esta dictadura que se aplica solamente a mi mismo.

miércoles, abril 12, 2017

Mi viaje a Tunez






Ultimamente con las novedades vivenciales, al que repito que estoy en una burbuja, describo mi primer viaje al continente Africano: Tunes.
Tunes tiene 10 millones de habitantes y generalmente son bilingües: hablan árabe y francés.
En el aeropuerto tomamos un bus, en una ruta sin semáforo y muy difícil de cruzar. La tarifa del bus fue muy barata.  Para ir al hotel pasamos por la calle España, un gran mercado callejero al que se sufrió por la cantidad de gente.
Dentro de la Medina, donde es fácil perderse, pudimos llegar al hotel dentro de la misma. La medina es una gran galería de negocios (Souks) con callecitas muy angostas. Es como volver al pasado.
Como para marcar bien las diferencias: La plaza del Kasba es muy ostentosa: donde está la casa del jefe de gobierno, así como todos los edificios. También sacamos pasajes de tren. La bebida oficial es el té, es muy barato y su moneda es el Dinar.
En resumen el Primer Dia recorrimos la medina, los edificios gubernamentales, tomamos té y fuimos al museo de Arte (una garcha).
El segundo día fuimos  a Sidi Bou Said, en tren. El tunecino suele ser muy social y se hablan entre todos sin conocerse. Sidi Bou Said es una ciudad de ventanas y puertas azules, con vista al azul Mar Mediterraneo.  Alli, fuimos al museo de la música, en un edificio llamado palacio, donde un millonario artista auspició transcribir en formato occidental la música oriental. Además de ver instrumentos muy raros (por ejemplo de una cuerda). Comimos mirando el mar y fuimos a las ruinas del Cartage donde se destacan, las ruinas del imperio, las termas, el anfiteatro.
A la noche, en Tunes, vimos un concierto muy bueno del grupo llamada Alphawin, donde fusionan rock con la música típica árabe. Una garra impresionante y la gente se ha contagiado bailando y cantando.
Al otro día paramos en Sussa, un lugar costero de Tunes, donde tiene sus murallas, sus medinas, la casa de un aristócrata polígamo, etc. Un lugar costero con mucha historia.
En el JEM donde fuimos en una combi, donde nos costó llegar, ahí está algo parecido al Coliseo de Roma, donde hay mucho menos turistas, y realmente se nota la diferencia y la tranquilidad que se vive. El JEM es un lugar austero, donde también cuenta con un museo de arte, en el que se destacan las obras de arte en cerámica, lo cual describe el proceso de esa profesión en esa época.  
Fin de año lo pasamos en los palmares de Tozeur, un lugar al que llaman la puerta del desierto. Hemos recorrido con el tren llamado Lizard Rouge, algunos paisajes hecho a la medida del turista, que recorre montañas y ríos. También fuimos a el Chott que son las salinas del Sur de Tunes.
Para destacar fue el caos para tomar un micro en Tozeur. Al no tener numerados los asientos, más toda la gente que se cuela, es una batalla tratar de ingresar al micro. Así fue que me paralicé cuando  no conseguí asientos y me bajé bloqueado, ante los llantos de ella.   El inspector la tranquilizó y hecho a todos los colados. Yo culminé sentado en un asiento harto incómodo y hablando más de 3 horas en un peudo idioma (algo así como francés e inglés) y divirtiéndome mucho con mis fallas y mi falta de sapiencia entre lo que puedo hablar con lo que no. En este viaje me sentí muy incómodo al no saber nada de francés.
En Resumen del viaje: El Dia 1 estuvimos en Tunes Capital: el grand marché y la plaza principal, El Dia 2 fuimos a Sidi Bou Said y el Cartage El Dia 3 fuimos a Sussa el 4 JEM y el coliseo. El 5to al 7mo dia fuimos a Tozeur donde hicimos el trencito, los palmares y las salinas (Chopp) El 8vo volvimos a Tunes paseo por el centro y la medina 9no El museo de El Bardo.