viernes, octubre 23, 2009

De familias propias, ajenas, adoptadas y rechazadas.


En el trabajo donde ejerzo, al ver una mujer embarazada de un hombre que hacía dos años fue padre de un hijo con otra mujer, me dio cierta curiosidad de como se iba arreglar, en un futuro inmediato, con dos familias.
La familia propiamente dicha, es establecido por el ser humano, los animales tienen instintos, sobretodo las hembras (en la mayoría de las especies) para cuidar en un periodo corto de tiempo a sus críos, el macho copula y luego queda absuelto de su rol de padre.

En el ser humano podría pasar lo mismo, pero hay una responsabilidad, ya sea genética o cultural, en el que el hombre debe hacerse cargo de los hijos.
La responsabilidad del hombre se puede hacer más sólida aún, con la identificación propia, a través de su hijo, ya sea a imagen y/o semejanza. Todas esas coincidencia hacen(o pueden hacer) que la relación filial entre padre-hijo se aferre más, ya que el padre psicologicamente es el sustituto de la madre sobretodo en los primeros años de vida del niño.

Volviendo al caso del principio, y en el mundo de hoy, donde el tiempo apremia, y el hombre se tiene que hacer cargo de un hijo fuera del hogar, y otro en el propio, siendo las criaturas dependientes de un ser adulto, teniendo la ventaja de convivir con uno de ellos,
¿Qué pasaría si fuese al revés ?, es decir el caso que la madre tenga dos hijos de dos padres distinto en un corto tiempo. Supongo que exactamente lo mismo, pero comúnmente con los niños adentro y en convivencia con la madre.

Un niño de hoy en día, además de su familia concebida, adopta o rechaza familias, sean el vínculo elegido con las nuevas parejas de sus progenitores.
En la actualidad, se va perdiendo la estructura de la familia tradicional, si bien, continúa en muchisimos casos, se va aceptando este tipo de mezcolanzas, que viéndolas a la distancia se hacen muy complicadas para desarrollarse individualmente.

Algunos dicen que le afecta al niño psicológicamente, los que tienen una mirada más conservadora, otros que mientras el niño sea educado con amor y buenos valores, se podrían sustentar muy bien y salir adelante.
Los niños simplemente se adaptan, el ser humano, a la corta o a la larga, generalmente es un ser adaptable, ya que se han cambiado los ritos y tradiciones.
La ventaja que un niño (adolescente o adulto), al tener tanta diversidad, y no basarse en lo tradicional, puede tener la libertad de elegir cúal es su verdadera familia, es decir, su sociedad primaria.
En la actualidad, se ve mucho más, como imagen enternecedora, la procreación, que la familia en sí.

La familia tradicional, sin dudas, entró en crisis, pero la misma desemboca en un nuevo modelo, donde una persona puedo concebir hijos, de tres familias distintas, por ejemplo, otrora, la negación de la construcción de un grupo familiar tradicional y simplemente la necesidad de estar en pareja con otra persona adulta. Generando un grado de incertidumbre, en cada cambio de los componentes familiares.
Ante tanta tecnología, las personas viven enajenadas en un chat, blog, foro, red social, generándole ilusión, a veces valorándolo más que el ser humano que se tiene al lado. ¿Será que la concepción de objetos despreciables o sujetos significantes no hacen distinción entre lo real y lo virtual?

Las cartas están echadas, los hombres y mujeres están inmersos en un nuevo modelo donde padres y/o madres adquiridas o rechazadas pueden formar parte de la familia elegida.

viernes, octubre 16, 2009

Maraton de Buenos Aires 2009: La loca, loca maratón



Contento por terminar la maratón número 22, prácticamente sin rasguños ni un gran esfuerzo. Se aparejó al hedonismo, simplemente por darse así y por sentirme bien al ritmo que llevé.

Comenzamos muy temprano el día, para largar de mañana, a las siete y treinta. Más de diez mil personas envueltas alrededor de una meta: completar 21 o 42 kilómetros de la mejor manera posible.

Al comienzo, tuve ganas de orinar, y es por eso que me separé de la carrera y en un arbolito meé. La gente me encerraba, la fobia hacia las personas crecía, hasta que veía a alguien conocido y me ponía a charlar. El kilómetro 4, fue adonde me acomodé con el camino, sufrí mucho la presencia de tanta gente estos primeros kilómetros. Aquí, con el tema “Como Ali”, rebotaba en vez de trotar.
Me aparejé, sin querer obvio, al ritmo de Gustavo Polzunkov y charlamas un kilómetro, hasta que apareció Vazgrial (un competidor nato) y tuvo la amabilidad de parar, tras mi grito: “VAZGRIAAAAAAAAAL” y saludarme con un medio abrazo. Acá mis gritos eran de placer y monocordes, el periodistas Martin Liberman me mirá con megalomania y dijo “jaa, ¿y este loco?”. Tuve la deferencia de putear a alguien que me ve como un pelotudo, total es gratis insultar a alguien que no tenés interés.

En el 9 km me acomodo aún mejor, con la música de Intoxicados, y Eduardo me pregunta si era Pitty, le digo que si y ya teniamos la subida de Viamonte bastante salada, en el 10 paso a Flecha y por Corriente sigo cantando, a viva vos: “Estamos enfermos, perdonen-nos”. Alcanzo a Felix y a Jackie en el 13 y me dicen: “Segui cantando”, yo pido disculpas, al igual que Richard que troté junto a él 500 metros. Aparece Calamaro por el 13 km, no fue muy cantado, pero canciones como “lejos”, “Acto simple”, me hicieron mover.
Al pasar el Ministerio de Economía, me encuentro a Marianito que compartimos Rio Tala. Hablamos un rato y el se despegó, pero fueron unos 400 metros de plática, como si no estuvieramos corriendo.
En Paseo Colon como una banana, y en cada puesto (cada 5km agua, o cada 7,5km gatorade) fueron respetado, no me gusta ingerir liquido corriendo, es por eso que caminaba unos 10 o 20 metros, bajaba las pulsaciones y volvia.

Paso la Boca en el 17, y del 18 al 20 me pasó un montón de gente, más de lo que yo podia pasar, es por eso que no paraba de saludar. En el 19 paré, nuevamente, para orinar, y Estelares fue lo que sonó. La llovizna se hacía lluvia

En el 21, Eduardo se encontraba al lado mio aún, pero en el 22 km, al escuchar Cristian Castro, comencé a correr más suelto y más alegre. “Azul “repetí innumerables veces. Uno me dice: “Sos la diversión de la carrera”, yo me lo pasé boludeando todo el trayecto de Cristian hasta el 27, que era lo largo de Costanera Sur…Aullando “Volver amar”, “Necesitas amar”. En el 27 lo encuentro a Marianito nuevamente, me mete el verso de que le explotó el gemelo, pero agarramos ritmo y pasamos gente, en el 29 no me soportó más y me fui solo.

El 30 lo paso con “la argentinidad al palo”, gritando a viva voz el título de la canción y jugando con un ciclista que ayudaba a otra persona y se bancó mis desafinados gritos hasta el 32, que no lo vi más. En el 33 comenzaron los Rodriguez, mucha gente camina y mucho más en el tunel de Sarmiento que teniamos sus respectivas bajadas y subidas, pero con viento fuerte en contra, para desembocar en el 35 y por fin doblar. Aquí tuve que hacer fuerza contra el viento, pero al doblar sentí como un ahogo ya que no corría aire e hizo calor.
En el 36 lo encuentro a Daniel Hernandez, lo saludó con un apretón de manos y le doy unos higos que la organización me dio.

En el 37 masticando un higo y entrando a los lagos de Palermo, me tropiezo con una loma y me queda un pedazo de higo en la garganta, al cual no pude escupir, recién en el 40 mediante una parada y un trabajoso gargajo lo escupo…Quedaban solo 2200 metros y canté “Todos atrás y Dios de 9”, “Malvenido” y “Sapo de otro pozo”, y la gente me miraba raro.
Mientras hice este eterno, lo ví a Nestor que era como mi zanahoria, y yo no lo reconocí porque me molestaba el sol en los ojos, también a Edgar tornillo y leo Carabatta.
Arribo a la meta y el “colo” Martinez me nombra y me pregunta si escuché a Calamaro.

La verdad fue un gran viaje, esta maratón, sabiendo que lo mio no es la práctica del atletismo en sí, porque ni paro el reloj al arribar a la meta, sino paro y festejo haber llegado.
Fisicamente culminé con el predecible cansancio, pero sin dolores ni mareos, y animicamente con una gran euforia; esta lucidez en el final y la alegría en el camino transcurrido me hicieron realmente feliz.

martes, octubre 06, 2009

Los patitos: Milagro de la naturaleza









Matraca me hizo feliz, ya me causó mucha ternura, viendóla empollar con paciencia, con nervios e histeria de una madre que espera a sus 8 hijitos: 3 amarillos y 5 grises.

La verdad tanta curiosidad y cariño me da ver moverse a la madre con sus pollitos. Es todo un aprendisaje
Gracias naturaleza por generar estos seres tan bellos y enternecedores

miércoles, septiembre 30, 2009

San Miguel del Monte Ultra de 100 kilómetros: Yo puedo resistir





“Se um dia eu pudesse ver, meu passado intero”. Cantamos en forma unísona con los compañeros de mesa brasileros, que durante la charla técnica les iba traduciendo, más o menos, lo que explicaron.
Mis compañeros de habitación: Washintong y Daniel hacian palmas y Pierpaulie y Fernando se reían
Así de distendida fue la cena.
Luego me costó enormemente dormir, me desplacé de un lado al otro, fui innumerables veces al baño y por mis nervios no concilié el sueño.
Además Washington se despertó a las 4 de la mañana y, al tener el sueño liviano, me despabilé.
Luego del desayuno y de pasar por el baño, caminamos un kilómetro para la largada, dos borrachos amenazaron a un corredor para robarles las zapatillas, y otros dos les pegaban con los buzos a cada auto que pasaba por el lugar, se veían las primeras luces del día y hacia mucho frío.

A las 6:30, aproximadamente, largamos, esperé con ansiedad pasar por el primer kilómetro, y la primer vuelta de 12 kilómetros no usé música, solo escuche los miles de pájaros posados en la laguna, paré para orinar y atarme los cordones de las zapatillas, fue una vuelta sin apuro y casi sin cansancio, paré en dos puestos solo a beber agua.
La segunda vuelta, me tuvo otra vez orinando y corriendo con Chien y Fernando del Parque Chacabuco, en ciertos tramos de la carrera, la gran bola del sol y el cielo despejado me dio algo de temor por lo fuerte que podría pegarme.

En el 20,5 tomo el gel, voy al baño y comienzo con “No lejos” de Ella es tan cargosa. La música que me deparaba hasta el kilómetro 28, era aleatoria, aquí me saqué el buso y comenzó Adicta. El colo Martinez me preguntó justamente lo que oía.

Al concluir la tercer vuelta me sentí bien, ya rumbo la cuarta las paradas para cambiar de artista de rock eran más seguida, porque lo hacía por puesto de hidratación, tal que Miranda, Tipitos y Juana la Loca, me ayudaron a completar 44 kilómetros sin sentirlo.
La quinta vuelta me sentía rápido y bien y ya habia hecho más de 50 kilómetros, aquí alcancé a Sergio el Coyote, y a un corredor de Mar del Plata de Legroup.

En la sexta y parte de la séptima vuelta el sol se hizo sentir en los kilómetros que iban del cartel del kilómetro 3 hasta el kilómetro 6, ahí me cuidaba de no hacer mucho esfuerzo. Igualmente en el puesto del 9,5, siempre Gerardo Ré nos recibía con comida, aliento y compañía: a mí y al Sergio Coyote (donde nos arreglamos para llegar juntos)
A pesar del sol pude aguantar hasta el 76 que tomé el tercer gel con un gusto asqueroso y artificial donde el estomago no aguanto y comencé a marearme, a tener alucinaciones: bichos, estilo polillas, que se me pasaban alrededor.

Al pasar el 78, corriendo, como todos los pasajes, “El colo” Martinez(relator de la carrera) me puso Calamaro, porque yo le dije lo que escuché en la anterior. Al igual que Dardo, casi un kilómetro después, que me pidió un canto con una gran sonrisa y el ya entraba en la última vuelta
Eso me animó, pero el estomago siguió en erupción. Tal es así que en el 79 escupía hasta el agua. Acá comenzó una larga caminata. Si bien mis ráfagas de corridas eran cortas, era bastante valorable caminar en esta etapa de la carrera. Ya que en ocasiones bajaba la cabeza, porque me mareé y porque tenía un fuerte dolor en la cervical, es tal así que me agachaba y me acordaba de dos cosas, una caminar como Pierpaulie, con los brazos sueltos y no en jarra. La otra estrategia era pensar en la canción de TURF/Sponsors: “Y tengo que moverme aunque me cueste avanzar”, cuando sonó en mi MP3 ese tema.
Al entrar la última vuelta y ver las caras de Pablo Marengo, Mercedes, el secretario de deportes hincha de Ferro, Daniel y un montón más. Y oír a Pablo Martinez : “Sebastián entra en la última vuelta, vamos”, me dio ánimo para hacer 600 mts corriendo y caer en el mareo.
El puesto del kilómetro 90 me desbastó, no sabía que hacer porque todo me daba asco, mi boca aún poseía el gusto del gel asqueroso es.
Nico y Fernando (a los que llevaba una vuelta) me pasaron y luego el Sergio Coyote. Del 90 al 94 los hice caminando, me faltaban motivaciones, a pesar de la última vuelta, el mal humor era más fuerte y mi cuerpo y mi mente estaban sin resistencia. En el 94 decidí parar para sentarme (acto que tenía que haber hecho 10 kilómetros antes) tome coca y asi como la vomité, expulsé todo lo demás. Un efímero dolor de cabeza me cubrió mi ser, y luego empecé caminando, comenzó a sonar “Me hace sentir” de Turf y empecé a correr y a sentirme mucho mejor.
Tenía 40 minutos para hacer 6 kilómetros y así bajar las 11 horas. Al menos agregué la motivación de la música al reloj. Paso a Fernando en el 95 y medio, lo paso a Sergio Coyote en el kilómetro 96. Y con Cuentos Borgeanos, con el tema “Resistir”, tomo todos los machetes(papelitos) y pasó la meta tirándolos al aire y dando una gran vuelta llena de emoción, abrazo a Francisco, a Mercedes y demás y la verdad me sentía desequilibradamente. Por suerte me sobraron 5 minutos y bajé las 11 horas, en cuanto a tiempo, pero que me dejó un gran sabor a pesar de los kilómetros recorridos.

Este evento es mi laurel deportivo conseguido en este año. Me quedará en el pensamiento por lo compartido con los corredores y organizadores, por la propia fortaleza, por el aprendizaje, por los errores de ingesta, por la alegría y por el camino tan largo, a pesar de que eran vueltas en la laguna, pero el mismo río cambia a pesar de que sea igual el trayecto de 11 kilómetros, pero son las sensaciones las que se modifican.

Todo esto es mi legado en el pensamiento.

miércoles, septiembre 23, 2009

Planificación y desconfianza



Falta poco para avistarme a locura de enfrentar una carrera de 100 kilómetros (Ultramaratón). Tengo la opción de no cometer este acto absurdo y hasta estoico, pero no sé porque lo quiero hacer, como broche de oro (de no se qué) o por lo menos exagerar los kilómetros que tan bien me hacen cuando corro solo con mi pensamiento y la música.
Mis pensamientos conducen a como seré en la carrera, aparecen gran cantidad de miedos, como la posibilidad inevitable de que me bajé presión y no pueda moverme con facilidad, que tenga alguna complicación física, en fin, son muchas horas cargando mi cuerpo y con cierto apuro en el tránsito.
Apunto a correr, los primeros 20 km, encerrado en mi pensamiento y en la auto-disciplina; de que no me tengo que pasar de ciertos ritmos cada kilómetro recorrido, luego comenzaré con la música, y a partir del 35, son pequeñas carreritas de 3,5 o 4 kilómetros.
La desconfianza está asociada al pasado año y a los temores descriptos de presión, deshidratación, calambres y mal humor.
Aquí contaré con muchas sensaciones introspectivas, ya que si lo hago es por, no me gusta mucho la gente y sí estar conmigo mismo, saliendo de competencias, roces, ironías y criticas hacia el mundo exterior. Nadie me juzgará, solo el tiempo y la música me acompañaran

Dejo como legado mi planificaciones de música y distancias.





















KmBanda
0-20Nada
20-27,5Ramdom
27,5-35Adicta
35-38,5Miranda!
38,5-42Tipitos
42-46Juana la Loca
46-49,5Mancha de Rolando
49,5-53El Bordo
53-57Estelares
57-60,5Calamaro
60,5-64Bulldog
64-68Smitten
68-71,5Attaque 77
71,5-75Capital Inicial
75-79Guasones
79-82,5Guasones
82,5-86NTVG
86-90Cadena Perpetua
90-93,5Villanos
93,5-97Turf
97-100Cuentos Borgeanos

martes, septiembre 15, 2009

Maratón de Punta del Este: La “mar”atón estuvo serena



Hoy escuchaba al gran Diego Capusotto y reflexionaba cuando se burlaba del informe en que hacia una humorada de las carreras de calle: “5000 pelotudos para el mismo lado, porque una marca de zapatillas dice que corras y que la consumas para comprarte otra”. En definitiva para el sector que ve correr como algo para evitar el sedentarismo y no para hacer un show tipo película norteamericana, para este sector sería un pelotudo.
Pero ¿que pasa para los que practican atletismo, aquellos que corren una maratón, con intención de bajar la marca, sino no lo hacen? ¿Qué opinan al que trota, porque ve como una especie de hito pasarlo bien en el camino y poder llegar? Y, no me entenderá y dirá (como Capusotto, pero con otro viraje) que soy un pelotudo.

Punta del Este me significo un regreso a la maratón, ya que en Rosario abandoné.
Titularía esta entrada como “el regreso del pelotudo” que volvió, cuan deficiente mental, a sonreirle a la gente y a cantar a viva voz cada vez que podía, en vez de controlar el tiempo y pulsaciones kilómetro por kilómetro.

Todo comenzó después de las 8 de la mañana, los primeros 500 metros se hicieron difíciles, ya que tenía ganas de hacer pis, así que me desvíe y oriné, luego pasé y saludé a las liebres de 4 horas, de 3:40 y de 3:50, en el kilómetro 3 un corredor del grupo Correcaminos, me dijo que me conoció en Colonia y yo le dije: “No cambio más”.
A otra persona que debutaba en maratón, luego de correr 10 km y media durante diez años, se mostraba algo sorpresivo, al verme cantar. “Lo importante es pasarlo bien”, le dije.
Luego me aparejé con un corredor porteño, un uruguayo y un brasilero. Y me dice, sacando conclusión de mi remera: Si iba a preparar un Ironman, saqué a flote mi odio a los ciclistas de la Reserva Ecológica y parafraseé a Ricardo Iorio (ex-V8): “Para mi los ciclistas son todos putos” y me despegué de él

Escuchaba a Adicta mientras gritaba a viva voz, persiguiendo a “El Fati”(por la inscripción en la remera) y a un brasilero de Porto Alegre.
En 10 kilómetros jamás vi al mar, me pareció que estaba en San Isidro por la dimensiones de las casas. ¡Eran enormes!

Cruzamos el puente de la barra en el kilómetro 13, anduvimos por ahí y salimos de la barra, allá por el 15, comenzó a sonar Bulldog por mi MP3, y cantando:”Una niña vi correr hacia el mar ella se fue y remojo sus pies”, se deslumbró el mar.
El viento era a favor. Sponsors me acompañó hasta pasar la media. Florencia me saludó y me sacó unas fotos.

A partir del 23 digo que “buena música me puse”, a lo que un señor responde: “Que buen humor que tiene el corredor”. Al pasar la península en el 27, el viento se apagó, mis fuerzas un poco también y en el 30, cruzando con “Cien años” caminó para tomar, vuelvo a para en el 32,5 km paré a tomar lo que me quedaba en la botella, y ya sentía mareos y calor, pero me reincorporé con ganas en el 34 cuando en mis oídos, el grupo No te va a gustar con los temas “Poco” , “Fuera de Control”, entre otros, me reestablecieron unos 3 kilómetros, para que en el 37,5 caminara nuevamente.

En el 37,5 concluyó la vista al mar y comenzó el barrio aristócrata nuevamente.
Algunas subidas, y el cansancio hacia que camine y corra en forma intermitente, pero renovando las fuerzas con las canciones y los aplausos de los habitantes del lugar.
Sin duda las fuerzas habían mermado un poco, pero así y todo pasaba gente, exceptuando a gente como Sergio coyote que en el 40 me pasó como palo, antes de una subida de 500 metros y devastadora que, bajaba aún más la glucosa.

Del 41 al 42 me pareció el kilómetro más largo (supongo que el más lento), pero ver que se acercaba el 42, trote y canté, y llegué con un baile ridículo, digno de un pelotudo más que un atleta. El Colo Martinez que, fue el locutor de la carrera, nombró, sorpresivamente, mi nombre y apellido, agregando el mote exagerado de ultra-maratonista, reverencia a la llegada, y una gran sonrisa acompañó a lo que yo llamo otro logro personal y otra fiesta en mi cabeza…¿Qué tonto, no?. jaaaaaaaaaaaaaa

jueves, septiembre 10, 2009

Pienso en vos





Hoy después de un año las cosas no son igual sin vos.
"Pienso en vos", la letra del tema musical de Smitten, es la mejor forma que tengo para recordarte y homenajearte en palabras, lo demás son imágenes y momentos en mi mente.

Cierro los ojos al pensar si estuvieras acá
ya no sería extraño, ya no tendría que escapar


Sería bueno que podamos hablar
hay tantas cosas que no pude contar
hoy no estoy bien, y te escribí una canción
y siempre, pero siempre pienso en vos

Y desde esta posición te veo a vos mejor
subir y prescindir del aire
del tiempo y la razón

Debe ser cierto ahora que Sueiro volvió
acá nos hace tanta falta algún Dios

Y aunque la música nos calma el dolor
yo siempre, pero siempre pienso en vos

Y aunque sigo pensando
en volarme con vos
queda tanto por los dos

Cierro los ojos al pensar si estuvieras acá

Conocí a una mujer de verdad
ella me entiende
y me ayuda a pensar
con los chicos ya sonamos mejor
y siempre, pero siempre pienso en vos