martes, mayo 22, 2018

El funk Carioca














Las favelas de Rio de Janeiro son totalmente vapuleadas, despreciadas, ficcionadas, apuntaladas, como origen de todo crimen con respecto a armamento, drogas o lo que sea. El conflicto racial llevó a matar cientos de personas diarias, durante el 2000 hasta el 2010, con varios juicios a policías que mataban por matar, para cumplir con los medios de comunicación, inventando una causa. A veces, era menudeo, y otras porque simplemente pasaban por algún lado donde un grupo de policías estaban pasados de merca y se cargaban a un "negro".  

Por otro lado, y universalmente, la música calma, pacifica, al que no pone la música en un lugar importante en su vida, realmente le desconfío. Porque de hecho es, sinonimo de alegría, reunión y de vida. Los faveleiros necesitaban expresarse a través de la música, por el medio que sea. Es por ello que unos aparatos muy barato que hacían música fácil, de manera electrónica se comenzaron a vender a fines de los años 80' algo así como los que se usaban en el Miami Booty Bass, entonces comenzando con los Tchuchuca con su "O bondi do Tigrao" y otros grupos. En Rio de Janeiro, por fin de semana, más de un millón de jóvenes iban a bailar a los establecimiento que pasaban música Funk. 

En principio, la música Funk Carioca trataba de conceptos muy machistas, homofóbicos, apologías a la delincuencia, promiscuidad,  y a las drogas. Se ha sacado una ley en el 2000 y luego reforzada en el 2008 sobre las letras de Funk Carioca, lo que hizo que el Funk Carioca se ramifique en Funk Melody, Funk Rock y otras yerbas. Aunque uno puede tomarse con humor el hecho de los roles de este tipo de improperios, aunque los abanderados de la moral y de la ética creen que la gente al escuchar ciertas cosas, las ejecutan. Sin embargo las películas tipo "Rápido y Furioso" donde las infracciones automovilisticas, los asesinatos a mansalva, el uso de drogas indiscriminado, el rol del hombre como alguien omnipotente son permitidas y poco cuestionado.  Si no te gusta no veas este tipo de películas y ni escuches este tipo de música. En fin, el mundo injusto en que vivo.

La música de funk carioca hace alegrar a los faveleiros brasileros y se extiende a los que le gusta bailar, sonreir y cantar con alegría. Yo celebro la alegría en esta vida apática y sin sentido, por eso observo con buenos ojos todas estas manifestaciones culturales, aunque no esté a gusto ni con sus ritmos ni letras.

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