martes, septiembre 15, 2009
Maratón de Punta del Este: La “mar”atón estuvo serena
Hoy escuchaba al gran Diego Capusotto y reflexionaba cuando se burlaba del informe en que hacia una humorada de las carreras de calle: “5000 pelotudos para el mismo lado, porque una marca de zapatillas dice que corras y que la consumas para comprarte otra”. En definitiva para el sector que ve correr como algo para evitar el sedentarismo y no para hacer un show tipo película norteamericana, para este sector sería un pelotudo.
Pero ¿que pasa para los que practican atletismo, aquellos que corren una maratón, con intención de bajar la marca, sino no lo hacen? ¿Qué opinan al que trota, porque ve como una especie de hito pasarlo bien en el camino y poder llegar? Y, no me entenderá y dirá (como Capusotto, pero con otro viraje) que soy un pelotudo.
Punta del Este me significo un regreso a la maratón, ya que en Rosario abandoné.
Titularía esta entrada como “el regreso del pelotudo” que volvió, cuan deficiente mental, a sonreirle a la gente y a cantar a viva voz cada vez que podía, en vez de controlar el tiempo y pulsaciones kilómetro por kilómetro.
Todo comenzó después de las 8 de la mañana, los primeros 500 metros se hicieron difíciles, ya que tenía ganas de hacer pis, así que me desvíe y oriné, luego pasé y saludé a las liebres de 4 horas, de 3:40 y de 3:50, en el kilómetro 3 un corredor del grupo Correcaminos, me dijo que me conoció en Colonia y yo le dije: “No cambio más”.
A otra persona que debutaba en maratón, luego de correr 10 km y media durante diez años, se mostraba algo sorpresivo, al verme cantar. “Lo importante es pasarlo bien”, le dije.
Luego me aparejé con un corredor porteño, un uruguayo y un brasilero. Y me dice, sacando conclusión de mi remera: Si iba a preparar un Ironman, saqué a flote mi odio a los ciclistas de la Reserva Ecológica y parafraseé a Ricardo Iorio (ex-V8): “Para mi los ciclistas son todos putos” y me despegué de él
Escuchaba a Adicta mientras gritaba a viva voz, persiguiendo a “El Fati”(por la inscripción en la remera) y a un brasilero de Porto Alegre.
En 10 kilómetros jamás vi al mar, me pareció que estaba en San Isidro por la dimensiones de las casas. ¡Eran enormes!
Cruzamos el puente de la barra en el kilómetro 13, anduvimos por ahí y salimos de la barra, allá por el 15, comenzó a sonar Bulldog por mi MP3, y cantando:”Una niña vi correr hacia el mar ella se fue y remojo sus pies”, se deslumbró el mar.
El viento era a favor. Sponsors me acompañó hasta pasar la media. Florencia me saludó y me sacó unas fotos.
A partir del 23 digo que “buena música me puse”, a lo que un señor responde: “Que buen humor que tiene el corredor”. Al pasar la península en el 27, el viento se apagó, mis fuerzas un poco también y en el 30, cruzando con “Cien años” caminó para tomar, vuelvo a para en el 32,5 km paré a tomar lo que me quedaba en la botella, y ya sentía mareos y calor, pero me reincorporé con ganas en el 34 cuando en mis oídos, el grupo No te va a gustar con los temas “Poco” , “Fuera de Control”, entre otros, me reestablecieron unos 3 kilómetros, para que en el 37,5 caminara nuevamente.
En el 37,5 concluyó la vista al mar y comenzó el barrio aristócrata nuevamente.
Algunas subidas, y el cansancio hacia que camine y corra en forma intermitente, pero renovando las fuerzas con las canciones y los aplausos de los habitantes del lugar.
Sin duda las fuerzas habían mermado un poco, pero así y todo pasaba gente, exceptuando a gente como Sergio coyote que en el 40 me pasó como palo, antes de una subida de 500 metros y devastadora que, bajaba aún más la glucosa.
Del 41 al 42 me pareció el kilómetro más largo (supongo que el más lento), pero ver que se acercaba el 42, trote y canté, y llegué con un baile ridículo, digno de un pelotudo más que un atleta. El Colo Martinez que, fue el locutor de la carrera, nombró, sorpresivamente, mi nombre y apellido, agregando el mote exagerado de ultra-maratonista, reverencia a la llegada, y una gran sonrisa acompañó a lo que yo llamo otro logro personal y otra fiesta en mi cabeza…¿Qué tonto, no?. jaaaaaaaaaaaaaa
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