miércoles, junio 30, 2021

Segundo Trimestre del 2021

 











Hoy, 30 junio, ademá de culminar el segundo trimestre del año o, para expresarlo mejor, la primera mitad del 2021.  Como me gusta hacer un seguimiento de mi vida, calificando mis dias de "bueno", "normal" o "malo", Junio ha quebrado la racha de meses no positivos, es decir desde Diciembre del 2017 que no cuento con más dias buenos que malos.  Celebro en estas líneas, sin necesidad de beber alcohol, sin la precisión de compartirlo con alguna o alguno. 

Sólo bajo el sin sentido de la vida, donde transito, a modo "outlet", pero me traslado, todavía, de un punto a otro sin rendir cuentas de la partida ni la llegada. 

El mes de junio, en cuestiones de negatividad fue el sufrimiento del dolor de cara, impulsado por la mandibula, y soportar los estragos de la artrosis que hace que no pueda tragar, que me arda detrás de los ojos, y que no le haya encontrado la vuelta siquiera con ejercicios, la presión de los aparatos hacen estragos en alrededores de la mandibula. 

En cuanto a lo positivo, fue haber apostado a la baja de la soja en la bolsa, más algunos activos como Ctio, Vista, Qcom, Txar, Lede, Come, etc, que me dieron un poco más de vida, para sobrevivir como un ser "burgués" y caprichoso. 

¿Que queda en este trimestre? Abril comenzaron las nuevas restricciones, pero no fue como el año pasado, ya que la señora que me ayuda en casa, pudo seguir viniendo, el cafecito en un bar no se cortó, pero si suspendieron el gimnasio y la pelota (a mediados mayo), que volvieron en esta segunda mitad de junio. En Mayo y Junio me dediqué a resumir o analizar balances para aprender sobre las empresas que cotizan en bolsa del Merval. A pesar del riesgo argentino, todavía es parte de la canasta de inversiones.  En este trimestre estuvo el cumpleaños de mi hermano y mi cumpleaños. Ambos me junté con él. 

Creo que tuve el cumple más tranquilo y menos excitante de mi existencia.  Saboreando una tortita de conos de "dulce de leche" que, realmente, me hace feliz uno minutos.  Mi debilidad y mi irritación casi crónica, hace que precise dulce de leche y/o chocolate para disfrutarlo. 

Este trimestre solo me acompañó el libro existencialista de Pessoa, que plantea su vida, con una retórica mucho más profunda y rica que la que puedo exponer, del lado de mis pensamiento de la misma. En contra de establecer jerarquías, importancias, valores, no distinguir los logros fisticios de los reales, las observaciones, el saberse que uno es "más chiquito" que los demás, concepto que no cambiaré, pero a pesar de mi pequeñés, no cederé en sugerencias, consejos, pertenecer a un grupo o "ismo", y a pesar de mi debilidad jugaré solo. 

Este trimestre tuve más sexo que todo el año pasado, y eso también levanta un poco. A pesar que tengo que ser muy laborioso para tenerlo, ya que los dias posteriores tengo una gran resaca, que no quiero ni puedo repetir, por ende, no tengo relaciones de cotidianeidad, pero no tengo fantasías de variaciones. Con quien entré en confianza, allá vamos, sin sentido de pertenencias.   En realidad, más allá de mi hermano, creo que ya deje de pertenecer a casi cualquier ser humano.  

Gente que aparece para pedir cosas, que me esquiva y que yo merezco ser eludido e ignorado, por ser enteramente un ser poco interesante, por el presente absurdo que tengo. 

Realmente no sé que se va a esperar para la segunda mitad del año, seguramente la pandemia va a seguir amenazando con nuevas variantes, a pesar que la gente se vacunó.  Yo como soy un ingente, espero ver que pasa con la burbuja de los vacunados, y no proyecté vacunarme aún. Tal vez lo haga más a fin de año, quizás no.


domingo, junio 20, 2021

El pesimismo

 








La tristeza inherente, y supuestamente hereda, me lleva al pesimismo, es decir, conceptualmente, proviene de "pessimo", lo peor.

Según Arthur Shopenhauer es el dolor perpetuo y el destino del ser humano es tratar de obtener lo que nunca se tiene.   Las películas, textos y algunos otros eventos, hacen que un escenario "feliz" sea permanente. ¿Y la permanencia de ese estado como no chocar en que se va? Pero, igualmente, es un entrenamiento de crear un subterfugio para crearse "una realidad" ficticia. 

Por otro lado, es muy díficil, chocante y frustrante como "ser vivo" que soy, leer a Shopenhauer o a Jose Ingenieros, por determinados conceptos que decaen a vivir como el fracaso mismo de hacerlo. 

Un referente pesimista, el italiano Giacomo Leopardi, padecía dolores físicos todo el tiempo, debido a la joroba que le crecia en la espalda (por una escoliosis galopante), y otros dolores donde yacían en la omnipresencia, haciéndolo un hombre enfermiso.  Un hombre o una mujer adoleciente cronico/a: ¿Como puede relacionarse con otros u otras? Así como algunos/as esconden sus arrugas, ¿Como esconder los embistes del dolor? ¿Como trabajar en un lugar con otras personas cuando el dolor desvía la concentración? Leonardi, tuvo la fortuna de poder escribir y trabajar aislado. Pero con estudios obsesivos que lo hizo un erudito a tal punto de escribir su primer obra: "Tragedia" a sólo 13 años de edad y solidificando su pesimismo. 

Algunos pensamientos de la obra de Leopardi, destaco:

"La paciencia es la más heroica de la virtudes, precisamente porque carece de toda apariencia de heroísmo"

"La felicidad está en la ignorancia de la verdad"

"La vejez es mala porque priva al hombre de todos los placeres dejándoles los apetitos".

"Mi pensamiento finge, y por muy poco mi corazón se espanta".

"Como es placentera la juventud, cuando aún es muy larga nuestra esperanza y la memoria breve".


Continuando con el pesimismo, sus legados y referentes, se habló que el mundo, con algunas excepciones, fue el peor mundo posible: por la pobreza, por las guerras, por los virus, por las represiones, por el cosumo exuberante, por la promoción a la perfección, por tener que llegar al apoteosis de todo, en fin.  El pesimismo sabe que por cada cosa que se emprenda, se llegaría a otro escenario que las leyes o reglas imponen.  Se toma al fracaso como una consecuencia de los parametros establecidos.  

Y ahora en época de pandemia, aquellos que no son pesimistas y creen que no hay contagios porque son muy cuidadosos, porque agregan a su cotidianeidad nuevos rituales, porque dejan de hacer cosas, entonces recaen en el pesimismo, porque la muerte es el sitio más pesimista de la vida misma. Y el temor a tener la posibilidad de morir se traduce en pesimismo (que algo malísimo puede pasar).

Dos frases simples que me encajan dentro del pesimismo son de Baltasar Gracián "presagio de desdichas es el llanto del recién nacido al llegar al mundo" y la de Pablo Pino: "Si a este juego entramos perdiendo, se juega la vida, se vive a la sombra de los gigantes devoradores".  

El miedo de comenzar a sentir, el miedo a acarrear cualquier tipo dolencia fisica, mental y/o racional (no necesariamente lo racional es real, simplemente se llega a una conclusión), todo se envuelve a una corriente pesimista, donde algunos o algunas tienen empatía al observarlo y otros u otras, verguenza y necesidad de escapar al puntualizarlo (vease la pobreza, vease la enfermedad, vease la vejez) . Y uno mismo puede ser empático o apático a diferentes escenarios de la vida.  Lo que estoy seguro no seré empático del campeón o de quien alcanzó la apoteosis, porque después hay que seguir viviendo.  

viernes, junio 04, 2021

Cumpleaños outlet

 










¿Outlet? Si, ya estoy de descuento, al peor postor y regalado, jajaj. Outlet porque la vida se me esfuma y cada vez tengo menos incentivos para seguir viviendo. El dolor me envuelve y me faltan ideas para enfrentarlos. 

Lo único que me obnubila son los sueños, no soñar como anhelo o deseo, sino como un transcurso sin fuegos artificiales, cuan película Argentina que suelo ver. 

Por ejemplo, soñé en peces, que los conservaba vivos en un balde rojo y que se llenaba de tierra y los tenía que meter en el agua y sacar la tierra, algunos eran muy raros. Y en mi entorno, acompañándome estaba Sebastián Estevanez, y yo le decía que trabajamos juntos en "Dulce amor" y "Camino al amor".  Un sueño sin ambiciones y disparatado. 

Hoy, comienzo un nuevo año, por el contexto debo estar agradecido de estar viviendo, sin merecerlo, pero viviendo.  Igualmente  ¿Quien pone los parámetros de merecimiento? Juego con el morbo, de la gente que escucho en los medios que lo único que hacen asesinar a gente como yo, retóricamente. ¿Tomaría un café? Si, para salir de la zona de confort de la comodidad de los que aparentan respeto, compañerismo y "amistad", cuando te la dan, merecidamente y con un variopinto de argumentos, por atrás.

Soy un ser autolimitado, pero es que el cansancio está a flor de piel por el dolor fisico. Me dejo dos reflexiones que vi por televisión:

En "Seres libres", con Gastón Paul, hablando de la adicción, pero identificado en el caminar y en la esperanza de una especie de "mesias", contó una situación:

"Se está en un pozo, totalmente solo, desolado y se tiene una pala y una escalera. ¿Que hace el adicto? Agarra la pala para seguir cavando, hasta que aparece otre y le dice, aca está la escalera". El hombre o la mujer, que me quiera mostrar la escalera, porque con su subjetividad quiere ayudar, prefiero seguir cavando, reflejando mi muerte en vida.

La otra historia es sobre una película que vi llamada "Omisión", donde el ser humano peca por "pensamiento, palabra, acto y/omisión". Esto quiere decir que peca en la vida misma, es como se mueve y son las 4 personalidades o comportamientos que se maneja cada quien.  Todos los actos muy distantes. El mundo está como está, por omisión, a pesar de toda teoría y acto. 

Comencé mi "cumpleaños" viendo "las venganzas del Beto Sanchez", película que vi muchas veces y justo la dieron en "Volver" a las 0:00 hs. Retrata a un señor totalmente ajeno a los parametros de como "deber ser". Las apariencias siempre ganan, por suerte les escapo todo lo que puedo, hasta que la desesperación, supongo por la desolación que el tiempo va dejando. 

Hoy, el tiempo es arena en mis manos, y mis relaciones sociales son transaccionales, no hay mucha emoción, siquiera argumentación para seguir caminando, pero ahi vamos.  A la noche veré a Tinelli, un ser vitupereado por la gente "que merece vivir" porque son "gente de bien" que están "del lado correcto de la grieta".  Lo veo, porque su elenco me hace reir sin parar, y quiero celebrar riéndome.